Los profesionales del centro de salud de Castell de Ferro participan en un simulacro de incendio para saber actuar en una situación real

El Área de Gestión Sanitaria Sur de Granada ha llevado a cabo un ejercicio de emergencias de incendio con evacuación total en el centro de salud de Castell de Ferro. Este ejercicio ha sido diseñado y coordinado por la Unidad de Prevención de Riesgos Laborales junto con la dirección del centro de salud. 

El ejercicio de emergencia ha consistido en una evacuación total, con la simulación de un incendio en una zona del centro mediante la utilización de una máquina de humo inocuo. El ejercicio comenzó a las 08.45 horas con la detección del fuego por parte de un celador que comenzó la extinción del mismo y avisó al personal que se encontraba reunido en la sala de juntas.

Al mismo tiempo se llevó a cabo la evacuación de las personas presentes en ese momento en el centro de salud. Una vez verificado el fin de la emergencia, todos los trabajadores y usuarios volvieron al centro para continuar con la actividad ordinaria. 

Evaluación

Finalizado el ejercicio de emergencia, todo los responsables de los diferentes equipos, junto con los observadores del simulacro, mantuvieron una reunión en la que se analizó el desarrollo de las actuaciones llevadas a cabo para verificar y comprobar la eficacia de la organización de respuesta, la capacitación del personal y la adecuación de los procedimientos de actuación ante la emergencia declarada.

Un elemento clave para el éxito y la mejora en la realización de simulacros es la puesta en común posterior de todo el equipo participante, junto con los observadores del simulacro, durante la que se analiza el desarrollo de las actuaciones llevadas a cabo para verificar y comprobar la eficacia de la organización de respuesta, la capacitación del personal, y la adecuación de los procedimientos de actuación ante una emergencia.

La formación teórica aporta a los profesionales conocimientos sobre el plan de autoprotección, equipos de emergencia, actuaciones a llevar a cabo en caso de emergencia, medios de extinción, etc., mientras que la formación práctica trata de desarrollar habilidades para que los participantes sean capaces de apagar un fuego real.