Prisión tras intentar quemar viva a mujer con líquido corrosivo
El titular del Juzgado de Guardia de Motril ha decretado el ingreso en prisión de F.S.L., de 40 años y vecino de Motril, como autor de un intento de homicidio sobre su mujer, a la que roció con un líquido corrosivo, que intentó prender, según informaron hoy a Efe fuentes de la Policía Nacional.
Los hechos ocurrieron en la tarde del 3 de julio, cuando funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía procedieron a la detención de un hombre identificado como F.S.L, de 40 años, que intentó acabar con la vida de su mujer, de la que actualmente está en trámites de separación.
Sobre el agresor pesaba una orden de alejamiento dictada por el Juzgado que le prohibía acercarse a menos de 500 metros de su ex pareja.
Tras recibir una llamada en la Sala del 091, los funcionarios policiales se personaron en el domicilio de la mujer, encontrándola tendida en el suelo con síntomas de haber sido rociada con algún líquido corrosivo.
Al parecer y según las primeras declaraciones de los testigos, el detenido entró a la vivienda por la fuerza y después de cerrar puertas y ventanas, roció a su ex pareja y la vivienda con un líquido corrosivo (salfumán), lo que provocó que ésta se desvaneciera.
El agresor, creyendo que el líquido era inflamable, intentó prender fuego al cuerpo de su mujer para, a continuación, incendiar la vivienda.
Gracias a la hija de la víctima y a su novio, que, tras percatarse de lo sucedido, llamaron inmediatamente al 091, se pudo evitar un final trágico.
Los funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía encontraron al agresor con una manguera vertiendo agua sobre el suelo, intentando borrar así el rastro del líquido vertido.
Después se dio a la fuga en un vehículo, intentando atropellar en su huida a un funcionario policial que intentaba impedirlo.
Finalmente la detención se llevó a cabo en un Hotel de la localidad de Motril, donde se encontraba alojado.
Una vez finalizado el pertinente atestado policial, el agresor fue puesto a disposición de los Juzgados de Instrucción de Guardia de Motril, el cual dispuso su ingreso en prisión.
La mujer, que sufrió graves quemaduras, ha sido ya dada de alta de la UCI del Hospital Santa Ana de Motril.
Los hechos ocurrieron en la tarde del 3 de julio, cuando funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía procedieron a la detención de un hombre identificado como F.S.L, de 40 años, que intentó acabar con la vida de su mujer, de la que actualmente está en trámites de separación.
Sobre el agresor pesaba una orden de alejamiento dictada por el Juzgado que le prohibía acercarse a menos de 500 metros de su ex pareja.
Tras recibir una llamada en la Sala del 091, los funcionarios policiales se personaron en el domicilio de la mujer, encontrándola tendida en el suelo con síntomas de haber sido rociada con algún líquido corrosivo.
Al parecer y según las primeras declaraciones de los testigos, el detenido entró a la vivienda por la fuerza y después de cerrar puertas y ventanas, roció a su ex pareja y la vivienda con un líquido corrosivo (salfumán), lo que provocó que ésta se desvaneciera.
El agresor, creyendo que el líquido era inflamable, intentó prender fuego al cuerpo de su mujer para, a continuación, incendiar la vivienda.
Gracias a la hija de la víctima y a su novio, que, tras percatarse de lo sucedido, llamaron inmediatamente al 091, se pudo evitar un final trágico.
Los funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía encontraron al agresor con una manguera vertiendo agua sobre el suelo, intentando borrar así el rastro del líquido vertido.
Después se dio a la fuga en un vehículo, intentando atropellar en su huida a un funcionario policial que intentaba impedirlo.
Finalmente la detención se llevó a cabo en un Hotel de la localidad de Motril, donde se encontraba alojado.
Una vez finalizado el pertinente atestado policial, el agresor fue puesto a disposición de los Juzgados de Instrucción de Guardia de Motril, el cual dispuso su ingreso en prisión.
La mujer, que sufrió graves quemaduras, ha sido ya dada de alta de la UCI del Hospital Santa Ana de Motril.
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