El PA de Almuñecar irá a los tribunales si la Junta 'para' el PGOU que se aprobará hoy

La Almuñécar que ha diseñado para el futuro el gobierno andalucista de Juan Carlos Benavides y que también han hecho suya los populares empezará a construirse hoy mismo, con la previsible aprobación del nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) en el pleno extraordinario que comenzará a las siete de esta tarde. Cuatro campos de golf, cinco mil plazas hoteleras y dos nuevos puertos deportivos son el buque insignia de este plan urbanístico, que doblará la actual superficie construida en Almuñécar.

Tras meses de negociaciones, encuentros y desencuentros, andalucistas (diez concejales) y populares (siete) se han puesto de acuerdo para sacar adelante un plan que contará con la oposición de los cuatro ediles socialistas, que no están de acuerdo ni en el fondo del documento ni en las formas con las que se va a aprobar.

Una vez que el pleno ratifique la aprobación inicial del nuevo plan, tendrán que pronunciarse con sus correspondientes informes las consejerías de Medio Ambiente y Cultura de la Junta, así como la Dirección General de Costas. Los siguientes pasos son los periodos de exposición pública del documento y alegaciones, previos al visto bueno definitivo, que tiene que dar la Junta.

Será entonces cuando se verá si se cumple la advertencia socialista de que este plan no pasaría del Suspiro del Moro. Pero a Benavides, amenazas las mínimas. Esto al menos se deduce de la reacción del alcalde almuñequero, que está dispuesto de llevar el tema a los tribunales y que sea la justicia la que decida, en el caso de que el plan urbanístico se quedase bloqueado por la Junta.

'La competencia para ordenar el territorio es de los Ayuntamientos y la función de la Junta es controlar la legalidad. El ordeno y mando no les va a valer con nosotros, eso es de tiempos de la dictadura', observa el alcalde almuñequero, siempre fiel a su teoría de que los socialistas utilizan su poder institucional para acosar e intentar derribar al Ayuntamiento sexitano, 'porque no soportan tener una presencia testimonial en la tercera ciudad de la provincia'.

La intención del equipo de gobierno es que, una vez desarrollado por completo el plan, se cierre el crecimiento de la ciudad y Almuñécar quede convertida en una ciudad de unos 50.000 habitantes, con el 22 por ciento de su territorio construido y unas instalaciones y servicios que den un giro total a la filosofía, actividad económica y conjunto social del municipio. Así, aseguran que se reequilibrarán los sectores productivos del municipio, con un trasvase de trabajadores y empresas que desembocará en el pleno empleo.