Almuñécar lleva 11 años luchando contra "el picudo rojo"

A su paso por Asia y el norte de Europa, el picudo rojo no ha dejado más que desolación. Cientos de miles de palmeras han sucumbido a su voraz avance en países como Irán o Egipto. Tan sólo en Israel, donde el brote fue detectado a tiempo, fue vencido. En España hace años que está instalado. En todo el litoral mediterráneo andaluz saben de su letal actuación.

Uno de los puntos donde lleva tiempo instalado en la localidad costera granadina de Almuñécar. Su alcalde, Juan Carlos Benavides, declaraba ayer que llevan once años luchando contra la plaga y que todavía no han conseguido erradicarla. «Comprendemos la preocupación, porque el problema es grave. Once años después de la aparición de la plaga, sigue en pleno vigor. Han sucumbido miles de palmeras y las medidas adoptadas han sido relativamente ineficaces».