El juez levanta el sumario de la autovía A-7

El juez que instruye el caso del accidente de la autovía del Mediterráneo, donde el pasado 7 de noviembre perdieron la vida seis trabajadores, cinco de ellos portugueses, después de que se desplomara una parte del viaducto en la zona de Taramay-Almuñécar, ha acordado levantar el secreto del sumario, según el auto al que tuvo acceso hoy Europa Press. 

Desde la citada fecha, el Juzgado de Instrucción número 2 de Almuñécar (Granada) decretó el secreto de las actuaciones debido al "carácter y gravedad de los hechos", para salvaguardar la fase central de la elaboración de informes y con la finalidad de asegurar el buen fin de las operaciones de toma de muestras --acero, tornillos, pintura, cimbras, encofrado, etc.-- del lugar del accidente, para su traslado y posterior análisis. Igualmente, se pretendía evitar declaraciones que pudieran tener como finalidad comprometer la imparcialidad del instructor. 

Así, puesto que las operaciones aludidas, que, según consta en dicho documento, "culminaron con el transporte", en la madrugada del 21 de diciembre, de los elementos tomados de la obra con destino al Instituto de Ciencias de la Construcción Eduardo Torroja de Madrid, "desaparece la causa principal que motivaba la medida de secreto adoptada".

Por ello, queda sin efecto la medida del secreto de las actuaciones puesto que, en este momento, "el conocimiento de lo actuado no va a perjudicar la investigación en curso", en opinión del juez instructor.

 Además de acordar levantar el secreto sumarial, se acuerda enviar "el oportuno testimonio de las autopsias a los fallecidos y que se remitan al Consulado de Portugal en Sevilla, así como a la hermana del español fallecido". 

Del mismo modo, las declaraciones recogidas por la Guardia Civil deben ser remitidas a la Inspección de Trabajo y la Unión Temporal de Empresas (UTE) La Herradura debe encargarse de la vigilancia y custodia del lugar donde ocurrió el accidente, bajo la supervisión de la Guardia Civil de Almuñécar.

 La UTE La Herradura --formada por Azvi, Proder y Obras Subterráneas-- subcontrató para la ejecución del viaducto a la empresa gallega Estructuras y Montajes Prefabricados, especializada en este tipo de obras, que a su vez subcontrató a la portuguesa Douro Montemuro. 

Además de la investigación judicial, la Inspección de Trabajo y el Ministerio de Fomento intentan esclarecer lo sucedido.