El cherry sube un 680% en el 'trayecto' del campo al consumidor
IDEAL: JM CHICHARRO.-Un tomate cherry nace en la Vega, crece, se recolecta, se envasa, se transporta a una gran superficie de Motril y se vende un 680% más caro de lo que costó al salir del invernadero. El agricultor recibe 70 céntimos por kilo. Al día siguiente, la gran superficie lo vende a 4,76 euros. Durante el trayecto de la Vega a la gran superficie motrileña, el tomate ha multiplicado su precio por siete. Los agricultores se quejan. Los consumidores, también.
«Alguien se lo está llevando 'de gordo'», comentaba ayer una señora en la zona de hortalizas del hipermercado Alcampo de Motril. En su mano llevaba un folleto en el que se informaba del precio en origen de diferentes productos y del precio que paga el consumidor. «Es alucinante», repetía, mientras miraba una y otra vez el folleto.
La información la había facilitado la organización agraria COAG a las puertas del centro comercial. Quería, de este modo, concienciar a los consumidores sobre la diferencia de precios en origen y destino. El objetivo de COAG es unir a agricultores y consumidores en la denuncia contra estos márgenes, que en ciertas épocas del año, llegan a ser superiores al 1.000% en determinados productos.
Perjudicados
«Los grandes perjudicados de este sistema somos los agricultores y los consumidores. Nosotros muchas veces no cubrimos ni siquiera los gastos y ellos pagan precios abusivos por productos que se cultivas a pocos metros de sus casas», explicaba ayer a las puertas del centro comercial Alcampo el secretario provincial de COAG Granada, Emilio Rodríguez.
La solución para evitar márgenes tan «escandalosos» pasa, según los agricultores, porque Gobierno y Junta desarrollen una Ley de Comercio y un Observatorio de Precios que regulen el mercado de los productos agrarios. «La Ley de Comercio, que ya se aplica en Francia, debe controlar la evolución de los precios desde el productor hasta el punto de venta donde son adquiridos por los consumidores», dice Rodríguez, que considera necesario que las administraciones competentes sancionen los «abusos» de los intermediarios, que «están arruinando a los agricultores».
Emilio Rodríguez recordó que en Granada «todas las administraciones están apoyando el fomento del Turismo, que nos parece muy bien, pero exigimos ese mismo apoyo a la agricultura que, hoy por hoy, es la principal fuente de riqueza de la Costa», apuntó.
Esfuerzos
El secretario de COAG recordó que el sector ha hecho «enormes esfuerzos por modernizarse, por ofrecer productos de la máxima calidad y por ser altamente competitivos», pero que la entrada de productos de Marruecos y países ajenos a la UE, «que no pasan control de fitosanitarios», está «acabando» con el sector hortofrutícola de la Costa. Por eso pide la implicación inmediata de Ministerio de Agricultura y Junta de Andalucía, porque «muchos empleos están en peligro».
«Alguien se lo está llevando 'de gordo'», comentaba ayer una señora en la zona de hortalizas del hipermercado Alcampo de Motril. En su mano llevaba un folleto en el que se informaba del precio en origen de diferentes productos y del precio que paga el consumidor. «Es alucinante», repetía, mientras miraba una y otra vez el folleto.
La información la había facilitado la organización agraria COAG a las puertas del centro comercial. Quería, de este modo, concienciar a los consumidores sobre la diferencia de precios en origen y destino. El objetivo de COAG es unir a agricultores y consumidores en la denuncia contra estos márgenes, que en ciertas épocas del año, llegan a ser superiores al 1.000% en determinados productos.
Perjudicados
«Los grandes perjudicados de este sistema somos los agricultores y los consumidores. Nosotros muchas veces no cubrimos ni siquiera los gastos y ellos pagan precios abusivos por productos que se cultivas a pocos metros de sus casas», explicaba ayer a las puertas del centro comercial Alcampo el secretario provincial de COAG Granada, Emilio Rodríguez.
La solución para evitar márgenes tan «escandalosos» pasa, según los agricultores, porque Gobierno y Junta desarrollen una Ley de Comercio y un Observatorio de Precios que regulen el mercado de los productos agrarios. «La Ley de Comercio, que ya se aplica en Francia, debe controlar la evolución de los precios desde el productor hasta el punto de venta donde son adquiridos por los consumidores», dice Rodríguez, que considera necesario que las administraciones competentes sancionen los «abusos» de los intermediarios, que «están arruinando a los agricultores».
Emilio Rodríguez recordó que en Granada «todas las administraciones están apoyando el fomento del Turismo, que nos parece muy bien, pero exigimos ese mismo apoyo a la agricultura que, hoy por hoy, es la principal fuente de riqueza de la Costa», apuntó.
Esfuerzos
El secretario de COAG recordó que el sector ha hecho «enormes esfuerzos por modernizarse, por ofrecer productos de la máxima calidad y por ser altamente competitivos», pero que la entrada de productos de Marruecos y países ajenos a la UE, «que no pasan control de fitosanitarios», está «acabando» con el sector hortofrutícola de la Costa. Por eso pide la implicación inmediata de Ministerio de Agricultura y Junta de Andalucía, porque «muchos empleos están en peligro».
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