TRES PROYECTOS COMPITEN POR LA ASCENSIÓN MECÁNICA AL CASTILLO DE SALOBREÑA

A lo largo del día, los tres despachos de arquitectura invitados han explicado sus proyectos al jurado, que emitirá su fallo dentro a final de mes. Las propuestas, que oscilan entre los cuatro a los diez millones de euros, utilizan conceptos muy distintas entre sí y van desde las escaleras mecánicas del coreano KimHun, el que menos impacto visual tiene, a la arquitectura espectáculo de Zaha Hadid o las estructuras ligeras de los madrileños Amid/cero9.   

AMID/ cero9 de Madrid, dirigido por Efrén García Grinda y Cristina Díaz Moreno, han sido los primeros en exponer su trabajo, para el que han contado con la colaboración de un equipo de ingenieros alemán, el estudio Schlaich, (creadores del la fachada del aeropuerto de Málaga) junto al que han creado una estructura ligera en forma de trípode, simulando una estrella de mar, que une dos conceptos: el práctico con dos ascensores distintos, uno más rápido y otro más lento según el   flujo de personas, y el espectáculo, ya que el lento sería como un observatorio en movimiento, un plataforma  de dos pisos para disfrutar de la panorámica.

La tercera pata iría situada en la plaza superior uniéndose en una sola cabeza.Según los arquitectos, no es una figura impositiva, es una estructura metálica tan ligera que se transparenta la roca, muy novedosa, que convierte una infraestructura de transporte en una atracción turística.Como elemento añadido proponen una singular recogida de agua de la roca, creando nuevos recorridos hasta la playa y una gran plaza en la zona superior para eventos.

Por su parte el coreano Kim Hun, ha proyectado un sistema de escaleras mecánicas, similares a las de Toledo, que se adentran en la roca a través de un túnel y emergen en una enorme plaza en la parte alta de la Villa.Visualmente es el que menos impacto tiene, pero el más complicado técnicamente.Según Kun, su concepto arquitectónico está basado en la propia vida del pueblo de Salobreña, con un flujo constante de gente que vive mucho la calle, que pasea por sus caminos, por lo que las escaleras mecánicas sería una forma natural de entender ese salto a la parte alta de la Villa.  

Por último la arquitecta Zaha Hadid ha presentado un funicular con dos moncarriles, que incluyen  dos terminales abiertos en sus extremos,  de formas angulosas siguiendo el recorrido de la roca y de materiales similares a la arquitectura local. Según la arquitecta este sistema de transporte ofrece todas las garantías para asegurar la protección del entorno y un sistema de ahorro energético único de máxima eficiencia.En cuanto a las cabinas del funicular, están adaptadas para todo de necesidades, con una capacidad variable de entre 16 y 25 plazas y con un sistema de guiado de carriles metálicos doble.