Agricultura comienza la campaña de requerimiento a los propietarios para la limpieza de las acequias

Con motivo de la cercanía de la época de lluvias, el Área de Agricultura del Ayuntamiento de Motril ya se ha puesto a trabajar en la prevención de posibles inundaciones que podrían venir provocadas por la situación de abandono de los cultivos tradicionales de la vega, además de por el estado que presentan las acequias.

 Francisco Villoslada, Teniente de Alcalde de Agricultura, Turismo y Pueblos Anejos ha informado de que ya se ha dado comienzo a la campaña con la cual se informa en primer lugar a los agricultores de la situación para proceder a requerirles la limpieza de sus acequias.

 “Cumpliendo con lo que establece la Ordenanza Municipal Agrícola y el resto de normativa que hay que aplicar en estos casos, los titulares de los terrenos son los que deben mantener en un estado de conservación adecuado las acequias de riego que pasan por su propiedad, de modo que se permita el paso del agua”, ha explicado el responsable municipal.

 La campaña dio comienzo la pasada semana y se está en proceso de hacer llegar la comunicación oficial a todos los agricultores que cuentan con acequias dentro de sus propiedades, dándoles quince días para acometer la limpieza íntegra de éstas para evitar  obstrucciones y librar a todos los vecinos de los malos olores que son provocados por la acumulación de desechos, teniendo en cuenta que además ese tramo de acequia pierde su capacidad de desagüe provocando inundaciones de caminos y fincas.

 Asimismo se pone en conocimiento de los propietarios que si debido a la falta de limpieza de balates y acequias se ocasionan desbordamientos y consecuentemente daños en fincas o caminos, serán responsables debiendo proceder a su reparación, incluida la pérdida de frutos, y a la devolución del camino o finca a su estado anterior. En caso de no hacerse de este modo, las tareas de recuperación las realizarán los Servicios Municipales subsidiariamente, repercutiéndose el coste real de los trabajos incrementado en un cincuenta por ciento, sin perjuicio de la incoación del correspondiente procedimiento sancionador.