FIDELIDAD Y LEALTAD por Juan José Escribano

Que dificil es encontrar entre la clase política existente dos palabras como fidelidad y lealtad. La primera de ellas, la fidelidad, es entre otras, la virtud de dar cumplimiento a promesas y la segunda, la lealtad, es la obligación de fidelidad que un ciudadano debe por ejemplo a su ciudad o/y así mismo.

Estas dos palabras, difíciles de llevar a cabo y entre los pactos que han existido hace unos días para conformar Corporaciones Locales, en multiples ocasiones, han brillado por su total ausencia y basadas sus realizaciones en explicaciones que nos llevan más que a pensar en algo diferente y que no es  la ideología de entre los que realizarán este cuatrienio de viaje , ni muchísimo menos las promesas, que a sus potenciales votantes les han ido ofertando en su campaña electoral. Como muchísimas de sus actuaciones…todo será mentira. De esto ultimo, y en el transcurrir del cuatrienio verán uds. como se cumple y con creces. Tambien puede que no pasados algunos meses, asistamos a perdidas de confianza; mociones de censura; cambios de alcaldes y corporaciones; abandono de concejalías; etc. …porque aceite con agua difícilmente mezclan. ¿Y dañados quienes?...pues como siempre,  el municipio y sobre todo sus ciudadanos.

A ver si existe alguien que me explique esos apoyos y ajuntamientos, entre partidos, en los que unos y según proclamaban y proclaman, denominan de hasta de dura derecha ideológicamente a otros, a cuenta de que aparecen. Que me explique alguien ello, porque no lo entiendo, a no ser que les haya llevado a actuar asi sólo y exclusivamente,  maniobras que nada tienen que ver con realizar y llevar a cabo políticas tan distantes por el bien ciudadano. Que me expliquen y para que todos nos entendamos, los apoyos y ajuntamientos repito que IU, en donde predomina la ideología de izquierdas del Partido Comunista (P.C.) ha realizado en toda la geografía española y sobre todo en Andalucia, al partido de centro derecha (P.P.).  Se me podrá decir que esos pactos se basan en lo que se llama …gobernabilidad. Pues bien, si gobernar es comportarse siguiendo ciertas normas, pues  empleando el vocablo popular de que “venga Dios y lo vea…” por muchas vueltas y revueltas que le doy , no encuentro políticamente hablando, razón y si valga la redundancia, “otras razones”. Estos actos que se producen, cada vez y en otras ocasiones públicamente lo he dicho, me dan mas la razón e históricamente esta probado que la autodenominada por ellos, izquierda española, nunca fue ni clara, ni fiel, ni leal.   

Esto último no se da en nuestra Ciudad. Y no se da, por la mayoría absoluta existente; por la cohesión que parece ser existe en el seno del  partido que la ha democráticamente obtenido  y porque no creo tampoco se cumpla aquello que algunos agoreros ya ponen en tela de juicio, de que después de las elecciones autonomicas y nacionales, a celebrar en 9 meses o antes, nuestro Alcalde, ocupe cargo a cualquiera de los dos niveles  y  aquel (el partido) se convierta en una torre de Babel y las luchas cainitas se produzcan. No creo vaya a suceder esto último. Ni lo creo, ni lo deseo y lo escribo, porque en campaña electoral nuestro actual Alcalde en muchas de sus apariciones públicas puso sobre el tapete las dos celebres palabras de fidelidad y lealtad, ante Ciudad y ciudadanos,  tal como las hemos definido.

Fidelidad y lealtad llevada a cabo, pese a quien pese y en determinados momentos, por un partido que conforma también la actual Corporacion motrileña. Me refiero al Partido Andalucista del que mucho se ha escrito y dicho, pero que cuando repito, estas dos palabras en política no eran, ni son tomadas en cuenta, el mismo, las puede enarbolar como bandera. Por dos veces, anteriormente cumplió su palabra de pacto en su doble sentido y hace unos días, lo ha vuelto a hacer, cumpliendo su promesa cuando ese pacto no es necesario, pero cumpliendo su promesa de que se va a Plaza de España a trabajar por lo nuestro y ese nuestro es Motril. Ha prometido desde su actual posición dentro del grupo que conforma la oposición, lealtad y fidelidad a los principios que en campaña electoral ofreció y con ello facilita y otorga “cheque en blanco” a la espera de que el grupo ganador logre los verdaderos, necesarios y suficientes además de importantes retos que se necesitan solucionar, para el bien de todos. No me cabe duda y mucho nos equivocaríamos pero asi apostamos,  que su oposición, cuando haya que hacerla y a veces tan necesaria, será leal y sobre todo fiel a sus promesas.