EL SEUDOPASEO MARITIMO DE CALAHONDA por Alfonso Fernández
La pasada primavera empezó a acometerse un pseudopaseo desde el Farillo de Calahonda, hasta la Chucha. Un proyecto que dormía desde hace nueve años en el cajón del autor, y con la aquiescencia y total apoyo del entonces alcalde de la ELA D. Manuel Estévez se puso en marcha. Sin previsión alguna, dejando a toda una playa en la más absoluta precariedad, se terminó a toda prisa, y ya es una rémora para toda una zona.
Un esperpento que ese hombre se tragó, con el único objetivo para Costas de deslindar sus dominios. Un muro kilométrico, sin accesos para minusválidos, un vial de colores peligroso, pero eso sí, con los mojones bien puestos.
Parece mentira que estemos en la era de la eliminación de las barreras arquitectónicas, y que ese Ente que es uno de los principales responsables de que el litoral español esté como está, ahora se erija en el salvador de lo poco que queda. Muy bien, pero así NO. No se puede ir a la playa, ya está. Olvidan los Directores de Costas que no hay nada más de todos que las playas, y la de Carchuna lo era. Es lógico que la mayoría de las personas que venían de Granada, Jaén, etc, a pasar el día se hayan buscado la vida en otros sitios. Una y no más.
Y para redondearlo, bien acotado entre los dos chiringuitos, se ha ubicado el botellón. Impresiona ver eso (me niego a llamarlo paseo) y la playa a las siete de la mañana. Problema recurrente este del botellón, ahora bien, ¿qué les ofrecemos a los jóvenes? ¿tienen alguna alternativa que no sea la de beber y beber? Costará trabajo y tiempo cambiar a quienes hemos educado en la cultura del alterne, pero hay que ponerse.
0 comentarios