CCOO y UGT rinden un homenaje a los obreros fallecidos en el desplome del viaducto de Almuñecar hace seis años

Los secretarios generales Construcción de UGT, Francisco Ruiz Ruano y de CCOO de Granada, Francisco Quirós, han rendido esta mañana un homenaje a los obreros fallecidos, hace exactamente seis años, en la Autovía del Mediterráneo mientras trabajaban en la construcción de un viaducto de la Autovía A-7 a su paso por el municipio granadino de Almuñécar.

El secretario general de FECOMA CCOO de Granada, Francisco Quirós, ha pedido que el procedimiento judicial, cuya celebración se ha fijado en el Juzgado de lo Penal Número 1 de Motril para el próximo 1 de febrero de 2012, “no se quede en un simple juicio ya que se trata de un presunto delito de sangre” por lo que ha pedido “que caiga sobre los acusados todo el peso de la ley”. Además, Quirós ha querido recordar a los 8 trabajadores que han perdido la vida este año en accidentes laborales registrados en la provincia de Granada; “hoy es un día homenaje para todos ellos”, ha terminado.

CCOO, en calidad de acusación articular ha solicitado un total de 288 años de cárcel para los doce imputados por la posible comisión de seis delitos de homicidio imprudente, tres de lesiones imprudentes y otros nueve contra la seguridad y la salud laboral. Además, pide para cada uno de ellos 21 años de inhabilitación especial para el ejercicio de la profesión, así como 86.400 euros de multa.

Por su parte, Francisco Ruiz-Ruano, secretario general de la Federación de Metal, Construcción y Afines (MCA) de UGT Granada, ha declarado su indignación porque el juicio de este trágico accidente se va a celebrar seis años y tres meses después de haberse producido, para añadir que es imprescindible que el proceso judicial. Previsto para el 1 de febrero, se celebre rápidamente, para delimitar las responsabilidades y se tomen las medidas precautorias necesarias para que ningún trabajador más muera en el tajo.

Por que la Justicia lenta, ha dicho, no es Justicia

Ruiz-Ruano ha recordado que UGT está personada como acusación particular, imputando en su acusación a diez personas por seis delitos de homicidio imprudente, tres de lesiones imprudentes y nueve contra la seguridad laboral, para los que además se solicitan las máximas penas que permite nuestro ordenamiento jurídico: 52 años y medio de cárcel, 45 años de inhabilitación especial para el ejercicio de la profesión, así como 146.000 euros de multa para cada uno de ellos. Para el representante de UGT, el origen del accidente, no sólo fue una inadecuada tornillería o una soldadura precaria, sino también la falta absoluta de un mantenimiento preventivo, que con toda seguridad hubiese permitido detectar los fallos en la estructura metálica.

Por eso, ha dicho, “aunque le pese a algunos, UGT ha seguido recordando este aniversario, para que el Poder Judicial tome nota de que no es de justicia la lentitud y la tardanza en un proceso de este calado, ya que se ha rayado en la desvergüenza”. Considera que “se tienen que dar muchas explicaciones, y también se tiene que pedir perdón a los muertos, a sus familias, a los sindicatos y a la sociedad en general”.