Manos Unidas pide una vez más solidaridad para Santa Cruz en Bolivia

Decir Esperanza Serrano es hablar de Manos Unidas, de solidaridad, de tocar las puertas para despertar la sensibilidad de las personas y decirles que hay seres humanos, millones, que intentan sobrevivir en el tercer mundo.

Los años no pasan por su espíritu. Cada día se hace más joven,  con más vigor y con más razón para  pedir por los demás. Siempre tiene la palabra justa para convencer  porque todas se filtran por un corazón que le  late en ocasiones con la ansiedad del miedo a no conseguir el objetivo solidario y otras con satisfacción y orgullo porque certifica que todos podemos colaborar en la medida de nuestras posibilidades.

Esperanza Serrano y en nombre de Manos Unidas anuncia un nuevo proyecto. En esta ocasión va dirigido a cinco comunidades rurales pertenecientes a los municipios de Torno, La Guardia, Cabezas y San Carlos, todos ubicados en el Departamento de Santa Cruz en Bolivia.

Hacen falta 65.000 euros para crear un sistema de abastecimiento de agua de consumo humano. El agua en malas condiciones se ha llevado ya demasiadas vidas en un mundo donde la atención sanitaria y las medicinas se hacen muy deficitarias.

Los habitantes de estas localidades se proveen de agua de los ríos, de pozos abiertos de poca profundidad y cavados a mano por lo que la contaminación en ellos es casi segura. En la época seca la situación es dramática. El índice de enfermedades respiratorias agudas y diarreicas alcanzan las máximas cotas.

Con este proyecto hidráulico casi erradicaría el grado de mortandad que se produce por esta causa. Los beneficiarios directos serían más de dos mil personas.

Manos Unidas saldrá a las calles de Motril el 10 de febrero con sus huchas y mesas petitorias. “Estamos en crisis, pero 1 euro puede ser la mejor inversión que en esta ocasión podemos hacer porque invertimos en seres humanos” diría a Motril@Digital nuestra querida y siempre entrañable Esperanza Serrano.