Cine Club Mediterráneo Motril proyecta hoy viernes "Un amigo para frank"

Este viernes a las 8 de la tarde, Cine Club Mediterráneo de Motril, proyecta en el centro Cultural La General la película titulada "Un amigo para Frank".

Comedia familiar y ciencia ficción son los dos géneros en los que se podría encasillar el largometraje debut de Jake Schreier, "Un amigo para Frank", filme que ha supuesto su consagración en el mercado norteamericano, avalado por el premio Alfred P. Sloan del Festival de Cine de Sundance en 2012. La amistad entre un viejo ladrón cascarrabias y su asistente robot da lugar a una historia entrañable y divertida, ambientada en un hipotético futuro, llena de gags cómicos que buscan la complicidad del público espectador ante los desencuentros iniciales existentes entre ellos. La película ha ganado el premio del públicoen el Festival de Cine de Sitges en 2012.El veterano Frank Langella es uno de los rostros más populares del cine norteamericano, destacando normalmente en papeles de villano, gracias a películas como "La novena puerta", "Buenas noches, y buena suerte" o "Sin identidad", aunque fue la nominación al Oscar por su excelenteinterpretación de Richard Nixon en "El desafío: Frost contra Nixon" la que le colocó en el candelero.

En esta comedia familiar se mete en la piel de un ladrón avejentado que es puesto al servicio de un robot cuidador para que le acompañe en sus últimos momentos. James Marsden (X-men, Perros de paja) encarna a Hunter, uno de los hijos de Frank y el culpable deque tenga a semejante enfermero.

También nos encontramos, en el film "Un amigo para Frank", con la atractiva Liv Tyler (El increíble Hulk, Armageddon), a la que recordamos de su caracterización como la elfa Arwen en la famosa trilogía "El señor de los anillos" además de la ganadora de un Oscar por "Pena de muerte, Susan Sarandon (Thelma y Louise, Pena de muerte), en el papel de la amiga bibliotecaria del protagonista.

El argumento narra la historia de Frank. Un ladrón de guante blanco retirado que, a sus 70 años, empieza a perder la memoria. Sus hijos, ya adultos, no pueden ocuparse de él y discuten entre ellos si le llevan a un asilo o no. Uno de ellos le compra un robot cuidador con el que el anciano no se siente cómodo al principio, pero, a medida que pasa el tiempo, la situación va mejorando paulatinamente. El problema resulta cuando el veterano ladrón reanuda su obsesión por robar joyas, algo que parecía ya superado por completo.