El sector apícola de COAG Granada se reúne en Vélez de Benaudalla para analizar la campaña

COAG Granada ha celebrado este fin de semana en Vélez de Benaudalla la Jornada Informativa y asamblea del sector apícola de la provincia , donde se ha abordado y analizado la situación del sector, presente y futuro.

Este acto, contó con la participación de Ángel Díaz, Responsable de Apicultura en COAG Andalucía; Fernando Molero, técnico de apicultura COAG Andalucía y Sela Torres, técnico de Apicultura COAG Granada. Se expusieron temas de vital importancia para los apicultores de Granada como el borrador de ayudas para el próximo Programa Nacional Apícola (PNA) 2014-2016 para el que COAG está presentando las pertinentes alegaciones basándonos en las necesidades y peticiones de los apicultores. “El presupuesto se ha incrementado respecto al anterior trienio en un 23%, un dato positivo si no fuera porque las ayudas ahora son en concurrencia competitiva y cuenta con unas exigencias mayores, por lo que provocará que muchos apicultores no puedan optar a las mismas”, destaca Miguel Monferrer, Secretario Provincial de COAG Granada.

En cuanto a las Ayudas Agroambientales, los técnicos de COAG explicaron a los apicultores que los perceptores que iniciaron la Ayuda Agroambiental en 2008 tienen la posibilidad de optar esta campaña a un segundo año de prórroga que ya pueden solicitar, hasta el 15 de mayo de 2014, en las mismas condiciones que en las anteriores convocatorias. Respecto a este asunto, “el sector apícola ha mostrado también su preocupación por la renovación de las ayudas agroambientales recogidas dentro de la PAC. Hay que tener en cuenta la importancia capital que tiene la labor de polinización que realizan nuestras abejas en el medio ambiente”, valora Monferrer.

En la asamblea, COAG recordó el arduo trabajo llevado a cabo desde la Organización Agraria para conseguir que Bruselas prohibiera tres tipos de neonicotinoides (Imidacloprid, Clotianidina, Tiametoxam) por ser altamente tóxicos para las abejas tuvieron su fruto a primeros de 2013 cuando se prohibieron el uso de estos, a los que se unió el Fipronil a mediados de año. 

 Este tipo de encuentros son “muy enriquecedores, ya que aparte de mantener informados a nuestros apicultores podemos conocer de primera mano sus inquietudes y preocupaciones para continuar representándolos en el sector”, concluyó Miguel Monferrer.