Granada capital es el único municipio de la provincia que pide que se aplique el carnet por puntos

En estos momentos, no hay ni un solo municipio en Granada que esté aplicando el carné por puntos en las calles que son de su competencia, lo que no quiere decir en ningún caso que haya impunidad: los policías locales siguen multando a los infractores exactamente igual que antes. El que conduzca ebrio o a una velocidad excesiva por una vía urbana de Motril o Loja va a ser denunciado y castigado con el mismo rigor de siempre. La única diferencia es que no se le restarán puntos.

Así están las cosas once días después de la entrada en vigor de la nueva normativa: si el imprudente es 'cazado' en una carretera interurbana, la A-44, por ejemplo, pierde puntos, pero no los pierde si infringe las normas de tráfico en la calle Medina Olmos de la ciudad de Guadix (la correspondiente sanción económica, se insiste para que quede claro, no se la quita nadie).

El panorama no parece que vaya a cambiar demasiado en los próximos meses. De momento, sólo la capital se está preparando para implantar el carné por puntos, según informó ayer Antonio Marfil, jefe provincial de Tráfico. Los contactos están 'muy avanzados' y Marfil pronostica que la ciudad de Granada podrá sumarse al sistema en cuestión de semanas. Casi con toda seguridad, va a ser el primer municipio de la provincia que lo haga. No hace falta tener dotes adivinatorias para llegar a esa conclusión.

Hasta ahora ninguna otra localidad -ni grande ni pequeña- ha dado el paso de solicitar a Tráfico la tecnología y los conocimientos para aplicar la norma. 'Hombre, todavía es pronto. Han pasado pocos días desde que se puso en marcha el carné por puntos', ofrece una explicación Marfil.

Lo cierto es que tampoco tienen obligación. La ley, y esto quizá es algo que no se sepa demasiado, no dice que los municipios tengan la exigencia ineludible de implantar el carné por puntos en sus calles. En consecuencia, dice Marfil, se entiende que la adhesión de los ayuntamientos al sistema tiene carácter voluntario.

Parece extraño, pero es lo que hay. Si Motril, Loja, Guadix, Baza o Almuñécar -por hablar solamente de las grandes localidades de la provincia- decidieran no aplicar la iniciativa, se daría la curiosa circunstancia de que un mismo conductor no perdería puntos si circulase mal por los citados municipios y, en cambio, sí se le quitarían si cometiera una infracción en la capital.

Diversas asociaciones de conductores ya han anunciado su intención de acudir a los tribunales porque entienden que esa situación no tiene sentido.

Ahora mismo, y por lo que se refiere al conjunto de España, sólo Madrid y Barcelona están aplicando el carné por puntos. En el resto de grandes ciudades no está en vigor.

Lo que está haciendo Tráfico con el Ayuntamiento de Granada, según las explicaciones de Marfil, es asesorar a los técnicos municipales y facilitarles la aplicación informática para que sean ellos mismos los que resten los puntos a los infractores. La Policía Local de la capital denunció el año pasado 11.786 casos de automóviles que estaban mal estacionados y perturbaban la circulación.

Casi tres mil de ellos estaban aparcados en doble fila, una práctica muy arraigada en las ciudades. Pues bien, cuando Granada instaure el carné por puntos, quien cometa esa infracción se arriesgará a perder dos.

Se quedarán sin tres puntos los motociclistas que transiten por las calles de la capital sin usar el casco, llevarlo mal puesto o no homologado.

Según los datos estadísticos que maneja la Policía Local, otra de las infracciones más comunes es saltarse un semáforo en rojo. Los patrulleros de la guardia urbana denunciaron más de tres mil casos en 2005. Supone la pérdida de entre cuatro y seis puntos.

Según los datos facilitados por la Guardia Civil de Granada, los días 1 y 2 de julio -que fue cuando arrancó el carné por puntos para las carreteras interurbanas: autopistas, autovías, nacionales...-, 80 conductores perdieron 348 puntos por distintas imprudencias. La más habitual: la conducción con tasas del alcohol en sangre superiores a la permitida. La ausencia de casco y la falta del cinturón de seguridad fueron las siguientes en frecuencia.