La Audiencia Provincial de Granada ha condenado a 4 años de prisión a Mohamed A. que actuó como patrón de una patera
La Audiencia Provincial de Granada ha condenado a 4 años de prisión a Mohamed A., marroquí de 24 años, que actuó como patrón de una patera que transportaba a una treintena de indocumentados, cuatro de ellos menores, interceptada por la Guardia Civil frente a la costa de Granada.
La sentencia considera probado que en la madrugada del 1 de noviembre de 2005, Mohamed A. fue sorprendido por efectivos del Servicio Marítimo de la Guardia Civil en aguas marítimas españolas a unas ocho o diez millas de La Rábita (Granada), a bordo de una embarcación neumática.
En ella transportaba a treinta personas de nacionalidad marroquí, cuatro de ellas con la apariencia de tratarse de menores de 18 años, con la intención de introducirlas en territorio español obviando las fronteras.
Mohamed había pilotado la embarcación desde su salida al mar en un punto no determinado de la costa marroquí próximo a la ciudad de Nador, previo concierto con los organizadores del viaje y con el propósito de emigrar él también a territorio español junto con las demás personas que viajaban en la lancha.
Para ello, disponía únicamente de sus limitados conocimientos como marinero de cabotaje y una brújula que se le facilitó.
La travesía, de una duración aproximada de 24 horas, la emprendió sin ningún tipo de medidas de seguridad ni sistemas de salvamento ni para sí ni para los pasajeros, pese a que la capacidad de la embarcación era insuficiente para su carga, navegando por debajo de su línea de flotación, por el número de personas que transportaba, quienes se veían obligados a permanecer sentados todo el tiempo, hacinados y apretados entre sí.
A pesar de estar el mar relativamente sereno, con ligera marejada en el punto de destino, el sobrepeso hizo preciso achicar agua con cubos durante determinadas etapas del trayecto, tarea en que ayudaban los propios pasajeros, quienes no disponían de agua, alimentos y ropas de abrigo sino lo que cada cual llevaba consigo, de suerte que al término de la travesía presentaban señales leves de desnutrición, deshidratación, agotamiento y frío.
En la sentencia, contra la que cabe presentar recurso de casación, el juez condena a Mohamed A. a cuatro años de prisión como autor responsable de un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros.
Además, se decreta el decomiso definitivo de la embarcación y motor y demás accesorios intervenida al condenado en esta causa.
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