"Linchamiento mediático" por Juan Mateo

Mientras el profesor agredido del IES Mediterráneo de Salobreña ha denunciado su agresión a la Guardia Civil, el caso ha encendido toda una campaña mediática de alcance nacional, con ciertos tintes de linchamiento contra un alumno, menor de edad, que presuntamente agredió a un profesor del IES de Salobreña.  Y digo presuntamente porque hasta ahora ningún juez ha emitido un fallo entorno al desafortunado caso. Sólo ha habido condenas. Desde la Consejería de Educación pasando por las centrales sindicales de la enseñanza solicitando la intervención de oficio del fiscal, profesores, alumnos…Y todo ello sin saber cómo y de qué manera, en qué contexto y el grado punitivo de la agresión. Es más, las versiones vertidas en los medios de comunicación no coinciden los unos con los otros.  Flaco servicio se le hace al alumno y por ende al profesor sin haber llevado a cabo una exhautiva investigación del caso y reaccionar como medida correctora el expulsarlo del centro sin conocer su destino formativo final.

La misma agencia EFE ha dado dos versiones distintas: “ Según ha informado a Efe la jefa de estudios del instituto, Elena Morales, los hechos se han producido esta mañana cuando el director trataba de separar a dos chicos que estaban discutiendo en el patio y, al coger a uno de ellos de las manos para mediar en el conflicto, "éste le golpeó en la parte temporal".

La otra versión: Según ha informado a Efe la jefa de estudios del instituto, Elena Morales, los hechos se han producido esta mañana cuando el director se encontraba en su despacho junto a otro docente y los dos alumnos supuestamente involucrados en el hurto, con la intención de resolver el asunto sin necesidad de llegar a denunciarlos ante la Guardia Civil".

Que no quepa la menor duda, estoy en contra de cualquier tipo de agresión, sea en las aulas, de género, en un centro hospitalario o en cualquier ámbito que nos ubiquemos. Lo que sí estoy en contra es lo de tomarse la justicia por su mano. Y en este caso concreto sí que se roza el linchamiento mediático hacia un presunto agresor menor de edad.

En el supuesto de que se produjera una condena, en estos casos la sociedad y  sus instituciones deberían responder con los mecanismos de reeducación social y educativo que se tienen. El Juez Tutelar de Menores de Granada nos podría dar muchos ejemplos de cómo hacerlo.