¿COLEGAS APOYA AL PP, PSOE. IU, PA ? por Gonzalo Serrano

Dentro del PSOE algunas personas afirman que somos del PP y por ello intentan aplastarnos. En esa línea están políticos de talante sectario y autoritario que preferirían que COLEGAS generalizase y atacásemos a todos los militantes y cargos públicos del PP diciendo “son unos homófobos”. 

Es también curioso que otras personas del mismo talante y en las filas de PP, IU y PA coincidan y afirmen que somos del PSOE porque colaboramos "demasiado" con las instituciones gobernadas por socialistas. 

A pesar de los ataques la realidad es que en COLEGAS nos sentimos libres para alabar las acciones de quienes, desde las instituciones públicas, lo hacen bien, al mismo tiempo que criticamos y ofrecemos propuestas a quienes lo hacen mal. 

COLEGAS es una asociación apartidista, por más que sea difícil de entender para las personas dicotómicas que lo ven todo en blanco o negro, sin matices ni colores… incluidos muchos gays, y no tantas lesbianas. Eso sí, no somos imparciales, pues estamos del lado de los derechos humanos, la igualdad de oportunidades y el respeto. 

Recibir ataques por personas de todos los partidos es sin duda un aval de que somos apartidistas... En estos últimos años hemos dado ejemplos sobrados de ello, criticando acciones de responsables públicos del PSOE en la Diputación provincial y del PP de Granada capital y en Motril, siendo únicamente algunos responsables del PP quienes se han disculpado y han rectificado tras nuestras críticas. 

Igualmente nos avala nuestra colaboración estable y responsable con instituciones gobernadas por el PP en Guadix y Motril, por el PSOE en Baza, en Loja y en algunas delegaciones provinciales de la Junta y por el PA en Almuñécar. 

Nuestra intención es siempre colaborar con quienes representan a la ciudadanía y valorar sus acciones individualmente, más allá del partido por el que se hayan presentado. En definitiva hacemos lo que queremos que nos hagan y se llama coherencia: que nos valoren a cada cual por lo que hacemos y no por el colectivo al que pertenezcamos, ya sea heterosexual, bisexual u homosexual.