García Chamorro pide al PSOE que se pronuncie sobre si apoya o no a Rubalcaba sobre la existencia de las Diputaciones

La vicepresidenta primera de la Diputación, Luisa García Chamorro, ha manifestado que los granadinos están “expectantes” y a la espera de que el grupo socialista en la institución provincial se pronuncie públicamente sobre cuál es su postura respecto a las declaraciones de su líder nacional, Alfredo Pérez Rubalcaba, anunciando su intención de suprimir las Diputaciones provinciales. “Es urgente y necesario que los socialistas de la Diputación, quienes ostentan la responsabilidad de representar a los ciudadanos en una administración por la que el PSOE nacional no quiere apostar, justifiquen públicamente si apoyan o no la intención de que las Diputaciones desaparezcan definitivamente, como así está dispuesto a actuar su líder nacional”, señaló García Chamorro. 

“Sentimos pena por los diputados socialistas por el brete gravísimo en el que los ha puesto el PSOE nacional y el dilema de partido que se les presenta, porque son ellos los que tienen que seguir dando la cara en los plenos de una Diputación en la que los socialistas no confían y excluyen, casualmente, desde que, en su gran mayoría, su gobierno está en manos del Partido Popular”, apostilló. 

La vicepresidenta no entiende que, mientras el candidato socialista defiende que en las Diputaciones “sobrarían” 1.000 puestos de trabajo que acarrearían un ahorro de 1.000 millones de euros, los diputados del PSOE en Granada votasen en contra de la reducción del 30 por ciento en cargos de confianza propuesta por el presidente de la Diputación, Sebastián Pérez, y que supondría a las arcas provinciales un ahorro de 5 millones de euros. “Choca con la nueva filosofía austera de Rubalcaba el que los diputados socialistas rechazasen, de plano y sin dar ninguna explicación, las medidas de austeridad más importantes aprobadas en una Diputación y que posicionan a Granada como ejemplo a nivel nacional de recortes económicos coherentes y acordes a la exigencia de contención en el gasto público”, manifestó García Chamorro.

Igualmente, el equipo de Gobierno provincial confía en que haya un pronunciamiento próximo por parte de los 57 alcaldes socialistas que gobiernan en municipios menores de 5.000 habitantes, “y que quedarían heridos de muerte, económicamente hablando, si las Diputaciones y, por ende, sus subvenciones desaparecieran”. “¿Qué opinan estos alcaldes de que su propio partido pretenda cerrarles el grifo financiero? ¿Podrán hacer frente a los servicios que diariamente solicitan a Diputación y que suponen su supervivencia gracias a los fondos provinciales?”, planteó la vicepresidenta primera, quien insistió en que los granadinos deben saber “si estos alcaldes comparten la filosofía del nuevo líder de su partido, a quien tendrán que refrendar en breve como candidato a la presidencia del Gobierno”.

En este sentido, reiteró el “dilema político” que se le presenta a los regidores socialistas “al tener que votar a un candidato que está dispuesto a dejarlos sin la asistencia de la Diputación Provincial”. “Dilema que debe quitar el sueño a la secretaria provincial del PSOE, Teresa Jiménez, quien ha mostrado ser incapaz de acallar o aplaudir las declaraciones de Rubalcaba como así le exige la responsabilidad de su cargo en la provincia y filas de su partido”, añadió Luisa García Chamorro, para quien las “huestes” de Rubalcaba en Granada tienen que terminar con la “incertidumbre” creada en el seno del PSOE y pronunciarse políticamente al respecto. 

“El dilema político que se le presenta a Teresa Jiménez se resolvería de una forma tan sencilla como que explique el voto en contra de sus huestes en Diputación a los recortes de austeridad y la posición de su partido a la intención de Rubalcaba de eliminar una administración de la que ellos mismos y 57 alcaldes de su signo político sobreviven”, apostilló. 

Por último, se mostró muy interesada en la opinión que el “portavoz en funciones del PSOE”, Gerardo Sánchez, tiene del papel que juegan las Diputaciones cuando hay una sentencia judicial que condena a cárcel a los “amigos y protegidos por Sánchez y Teresa Jiménez del clan de Armilla” en la que expresamente se recoge que “puede haber sospechas de la intervención de Gabriel Cañavate por su condición de vicepresidente de la Diputación y concejal del Ayuntamiento de Armilla, interesado en que se emitiera determinado informe desde los servicios jurídicos de la institución y no el que podía ser contrario al plan, elaborado por el jurista del Ayuntamiento, puesto que amen de esta circunstancia es de sobra conocido que los informes que emiten los servicios de Asistencia a Municipios son de varios meses tras su petición, y no con la rapidez extraordinaria del caso, a pesar de no ser Armilla municipio preferente y tener asistencia jurídica y técnica propia”.

“¿Por qué no aclara Gerardo Sánchez si está en contra de las Diputaciones, cuando sus servicios le permitieron a sus protegidos del clan de Armilla encubrir la tropelía urbanística más grave de la historia de Granada con el proyecto del Centro Nevada? ¿Ahora que el PSOE ya no puede hacer chanchullos en la administración que presidió durante 30 años es necesario que desaparezcan?”, subrayó García Chamorro.