Los alumnos del CP Virgen del Mar de Calahonda no acuden a clase

Foto: Nicolás Navarro

Los niños del Colegio Virgen del Mar de Calahonda no han acudido este lunes a clase como medida de seguridad, ya que aunque los accesos al centro están despejados el patio del colegio está anegado y numerosos camiones siguen circulando por la zona en el marco de las tareas para retirar el barro acumulado tras las intensas lluvias del sábado.

Mientras tanto, los vecinos afectados por los desbordamientos de las ramblas Vizcarra y Rejón siguen contabilizando los daños, que se extienden a calles, viviendas, infraestructuras municipales y 60 hectáreas de invernaderos, según ha informado la presidenta de la ELA de Carchuna-Calahonda, Concepción Abarca.

Las primeras estimaciones de los agricultores apuntan a una pérdida de entre seis y siete millones de euros, ya que el barro que ha inundado las explotaciones ha dañado todo el fruto y no será posible volver a cultivar en estos invernaderos hasta que queden limpios en su totalidad.

Esta situación constituye una "catástrofe" para la zona, donde buena parte de los habitantes viven del campo o de empresas relacionadas con el mismo, lo que, según Abarca, también se dejará notar en los comercios del pueblo vecino de Motril.

Abarca ha explicado que aún es pronto para cifrar los daños en las viviendas y demás infraestructuras, ya que se prevé que sea a lo largo de esta jornada cuando los afectados por las lluvias comiencen a cuantificar los daños para solicitar ayudas en la oficina habilitada al efecto en la entidad local.

El pasado sábado se llegaron a registrar en Calahonda hasta 55 litros por metro cuadrado en tan sólo dos horas, provocando el desbordamiento de las ramblas de Vizcarra, siendo esta una de las zonas que permanecen más afectadas, y Rejón. La primera de las ramblas desemboca en el pueblo y lo cruza, por lo que su limpieza es una prioridad. Junto a la rambla de Rejón hay numerosos invernaderos y es donde se localizan los daños.

El Plan de Emergencia Municipal cuenta con más de 80 operarios de Bomberos, Policía Local, Protección Civil y Limdeco, junto a toda la maquinaria pesada de que se dispone, a los que se unen efectivos de Diputación y de la Junta de Andalucía, en concreto, el Infoca.