"NO HAY MOTIVO ALGUNO POR LOS CIUDADANOS PARA FESTEJAR EL DÍA DE LA CONSTITUCIÓN" por Jesús Pérez Sánchez
Al reflexionar sobre la festividad de la Constitución, me he preguntado ¿si objetivamente tenemos algo que celebrar?, y la respuesta a la que he llegado como conclusión, es que NO, sino que por el contrario, sólo puede ser un día para considerar que la Constitución que en 1.978 fue aprobada por la mayoría de los ciudadanos, no sirve como medio para conseguir la seguridad y el bienestar de los mismos en condiciones de igualdad, y que obligue a los poderes del Estado a que las decisiones se tomen en beneficio del conjunto de los ciudadanos. Por tanto los programas políticos que se presentan para ser elegidos deben ser un compromiso a cumplir, un pacto que obligue a las fuerzas políticas con los ciudadanos cuando se obtiene el respaldo en las urnas.
Considero que al igual que cuando entre los intervinientes en un contrato civil acuerdan libremente la adopción de unas obligaciones lícitas, desde el punto moral, como desde el legal y que no atentatorio contra los principios constitucionales, obligan a las partes, con lo que si la formación política considera que se deben cambiar las condiciones pactadas, en el caso de los partidos políticos electos, deben hacer un referéndum para que los electores puedan mostrar su conformidad con las modificaciones. El no hacerlo supone un atentando a la libertad de los ciudadanos y por tanto al derecho de elegir por mayoría la marcha de un país.
Las consecuencias de los incumplimientos de los programas políticos y por tanto el prometer una cosa y hacer otra, desde mi punto de vista, son las siguientes: El parlamento elegido en España, no interviene en las decisiones para la solución de los graves problemas que venimos padeciendo por la crisis, se nos está imponiendo unas decisiones que son dramáticas, para los más desfavorecidos, desmantelando el Estado del bienestar que se había conquistado en los años de democracia; todo ello, por unas personas que no son elegidas por los electores: Los que ostentan el poder de la Unión Europea, minoritarios y con grandes intereses financieros y en los mercados, sin haber sido elegidos, mediante las primas de riesgos, sólo consiguen aumentar las diferencia de clases, (los ricos cada día son más ricos; y los pobres aumentan en número y más pobres).
El Parlamento Europeo, carece de competencias para decidir y controlar a la Comisión Europea e imponer políticas que dé soluciones a los problemas de los ciudadanos europeos, con las que se garantice su seguridad y bienestar.¿Qué hacen?, la sensación que tengo, es qué muy poco en relación a lo prometido en las campañas electorales.
Me pregunto: ¿ como es posible, qué se desmantele la banca y las empresas públicas, privatizándolas, para encontrarnos, en estos momentos, sin políticas monetarias, ni económicas qué puedan favorecer soluciones no traumáticas?; ¿Como es posible, qué el BCE con el dinero de todos los europeos, el nuestro también, financie a los bancos al 1 %, y qué después estos exijan el 6 ó 7 % de interés, casos de España, pero también de otros como Grecia, Portugal, Italia, etc., mientras que Alemania, Francia.., pagan el 1% € o poco más?
Los españoles cada vez tenemos menos confianza, en unas instituciones que siguen todavía ajenos a los graves problemas de los españoles: la abrumadora cifra de paro, las ayudas a personas con discapacidad y a las personas dependientes, los desahucios, desmantelamiento de la sanidad y la escuela pública, etc., todo se quiere justificar con la crisis económica, como si el hombre estuviera al servicio de los poderes del Estado y de la Economía y no al contrario. Por tanto no tengo motivo alguno, en este momento, para festejar el día de la Constitución, cuando ésta NO se utiliza para resolver los problemas de los ciudadanos.
Jesús Pérez Sánchez
Abogado y exconcenjal motrileño
0 comentarios