CCOO PIDE QUE SE RECONOZCA LA FALTA DE MEDIDAS DE SEGURIDAD EN EL SINIESTRO DE LA A-7

CCOO espera que se fije pronto una nueva vista oral, tras la no comparecencia de un testigo que ha obligado hoy a posponer la celebración del juicio contra la empresa Hormacesa por falta de medidas de seguridad, a raíz de un accidente laboral que sufrió un trabajador en el tramo de la A-7 donde un año antes perdieron la vida un grupo de obreros, mientras realizaban tareas de reconstrucción de la autovía.

El sindicato pretende que se reconozca la carencia de medidas de seguridad que había el 13 de noviembre de 2006 en el lugar donde la víctima resultó accidentada, después de  acudir por mandato de su jefe a realizar un trabajo a las siete de la tarde. El trabajador se encontraba además fuera de horario laboral, y en el lugar del siniestro no había apenas visibilidad. Como apuntan los informes técnicos elaborados por el sindicato en 2006, la máquina compactadora falló y el trabajador se vio obligado a saltar del vehículo que no estaba capacitado para realizar el trayecto y no respondió en una pronunciada pendiente, por lo que terminó cayendo por un terraplén.  

Como denunció en su día CCOO, la caída le provocó una serie de fracturas que le obligan desde entonces a caminar con muletas y lo mantienen inhabilitado de por vida. Además, Quirós (CCOO) ha denunciado que este accidente "se ha intentado ocultar por todos los medios al haber ocurrido un año más tarde en el tramo de la A-7 siniestrado donde perdieron la vida un grupo de obreros". 

Afortunadamente, ha terminado el representante sindical, después de seis años de calvario y de haber llamado a todas las puertas, esperamos que se haga justicia. El sindicato cuenta con un informe favorable de la Inspección de Trabajo que constata la existencia de falta de medidas de seguridad.