Aumenta en 500 el número de inmigrantes llegados en 2005, pese al descenso en verano, según Cruz Roja

El número de inmigrantes llegados a la costa de Granada en los meses de verano descendió a la mitad, según las atenciones realizadas por los voluntarios y el ERIE (Equipo de Respuesta Inmediata a Emergencias) de Motril (Granada), dependiente de Cruz Roja, aunque en lo que respecta al volumen total de lo que va de 2005 el número es superior en medio millar a los datos del pasado año.

Según confirmó hoy la responsable del servicio, Nines Fernández, desde el 1 de junio hasta el 31 de agosto se han interceptado 657 extranjeros en situación irregular, lo que supone un descenso cercano al 50 por cierto con respecto al verano del 2004, que en el mismo período registró la detención de 1.258 indocumentados.

La coordinadora de los voluntarios atribuyó este descenso al "mal tiempo y al estado de la mar del mes que ha concluido", cuando se han interceptado 86 inmigrantes, mientras que en 2004, en el mismo mes, fueron 777 los magrebíes atendidos.

Nines Fernández calificó esta época "de más tranquila que en otras ediciones" y destacó que la labor de los voluntarios en las tareas de atención alimenticia y sanitaria ha sido "perfecta".

No obstante, aunque la llegada de inmigrantes ha sido menor este verano, en lo que va de 2005, son 1.590 los detenidos, frente a los 1.100 del mismo período del año pasado, indicó la portavoz de Cruz Roja. Estos datos arrojan un incremento de casi medio millar de inmigrantes clandestinos que ha arribado a la costa granadina, "lo que se traduce en un crecimiento del flujo migratorio en torno al 30 por ciento", subrayó.

La responsable del ERIE destacó, por otra lado, la actitud de los inmigrantes cuando son interceptados, "que en ningún caso se muestran agresivos con los voluntarios que los atienden sino al contrario", ya que, según resaltó, "siempre se muestran muy agradecidos a pesar de la desilusión de un viaje que ha sido frustrado". También manifestó que el trato con los menores inmigrantes es el "más amable".

De cara al último cuatrimestre, Fernández espera que el otoño-invierno, debido a que las condiciones meteorológicas suelen ser adversas, "se desarrolle con normalidad". Además, añadió que "el equipo de respuesta inmediata va a seguir activado, con la misma plantilla, e incluso con un número de voluntarios mayor al de otros ejercicios".