Sealand, de radio pirata a bahía pirata

 Sealand, un autoproclamado principado no reconocido oficialmente por ningún país, y que la inmobiliaria motrileña InmoNaranja  puso en traspaso el día 1 de enero, a pesar de su desorbitado precio de salida, 750 millones de euros, se ha convertido en un interesante producto que ya tiene demasiados “pretendientes”.

Gabriel Medina, gerente de InmoNaranja, la empresa encargada de la gestión del traspaso del autoproclamado “principado de Sealand” se ha sorprendido del gran número de empresas que han mostrado interés en la posibilidad de ser los nuevos “príncipes de Sealand”.

 

Después de sólo 13 días del anuncio oficial de la posibilidad del traspaso de Sealand (1 de enero de 2007) ya han sido cerca de una veintena las empresas y particulares que han mostrado interés en adquirir este singular lugar ubicado frente a las costas inglesas. Según InmoNaranja la mayoría de las empresas que han solicitado información sobre el procedimiento de traspaso proceden de Estados Unidos, aunque también se han recibido peticiones desde Libia y algunos países europeos.  Con respecto a la noticia sobre la intención de una web denominada “The Pirate Bay” de optar a la transferencia de Sealand, Gabriel Medina ha indicado que no han recibido ningún tipo de comunicación de este grupo y que en caso de recibirse quizás no podría optar a la misma ya que una de las condiciones puestas por los actuales ocupantes de Sealand es que ninguna de las actividades que se quieran llevar a cabo en Sealand tengan ningún tipo de acción en contra del Reino Unido y quizás este grupo no cumpla esta condición, aunque ha indicado que esta decisión corresponde, en caso de presentar una propuesta, a los actuales representantes de Sealand.

 

Gabriel Medina ha querido explicar el motivo por el que su pequeña inmobiliaria situada en plena Costa Tropical de Granada es la encargada de esta transferencia tan peculiar: “Hace medio año que InmoNaranja está funcionando, en principio nos queríamos diferenciar del resto de inmobiliarias aportando una visión más tecnológica en este sector eso nos llevó a ofertar la posibilidad de vender una isla privada a través de teléfonos móviles con conexión a internet y fue tan enorme el interés de la gente por las islas que redefinimos el concepto de InmoNaranja y nos especializamos en la venta de islas, ahora disponemos de 7 islas directamente de propietarios.  Una de las preguntas que la mayoría de la gente nos hacía cuando se interesaban por las islas que vendemos era siempre la misma ¿si compramos la isla podemos crear nuestro propio país?, a lo que evidentemente nosotros le respondíamos que no, la isla pertenece al país en donde se encuentra ubicada, pero esto nos hizo pensar y recordamos un eslogan o anécdota de unos importantes almacenes británicos a los que un cliente se acercó y solicito comprar un elefante y, de un modo muy natural el dependiente le preguntó ¿Africano o Indio?, dejando claro que estos almacenes lo tenían todo. Tomando como base esta anécdota desde InmoNaranja nos pusimos a ver la posibilidad de ofertar un país en venta y como evidentemente esto no es posible nos decidimos por Sealand que es lo más cercano al concepto de país, teniendo claro que no lo es y que no está reconocido por ningún otro país, pero es lo que más se parecía al concepto que todos tenemos de país. Después de varios meses de comunicaciones con el “Gabinete de Asuntos Internos” de Sealand conseguimos que pusieran un valor y unas condiciones a Sealand y desde entonces estamos con esta singular odisea”, declara el gerente de InmoNaranja.

 

Gabriel Medina reconoce que en un principio veía prácticamente imposible que nadie se interesara por Sealand debido a su precio y se declara el primer sorprendido por el excesivo interés mostrado por empresas norteamericanas por esta antigua plataforma antiaérea.

 

Sealand comenzó siendo la sede de una radio pirata que emitía desde aguas internacionales y al parecer “The Pirate Bay” ha pensado que no hay nada mejor que volver a los orígenes y en lugar de que las ondas de la antigua radio pirata llegue a las radios, ahora con las nuevas tecnologías lleguen hasta las ordenadores.

 

En todo caso Gabriel Medina reitera que no se ha recibido ninguna propuesta de este grupo, al menos identificados bajo esas siglas para optar a la transferencia de Sealand.  Medina ha aclarado que además de realizar una propuesta económica que puede ser superior o inferior al importe anunciado en su web de 750 millones de euros las empresas o particulares interesados deben aportar un breve dossier de los proyectos para Sealand y que además debe existir una cláusula en la que se comprometan a no actuar bajo ningún concepto contra los intereses del Reino Unido.

 

A pesar de las numerosas propuestas que se están recibiendo el responsable de InmoNaranja ve muy difícil que este traspaso puede llevarse a cabo ya que muchas empresas temen que el “status quo” actual de Sealand pueda verse modificado si los actuales propietarios transfieren este sueño de ser un país que el próximo 2 de septiembre cumplirá 40 años.

 

En cualquier caso InmoNaranja, al igual que los grandes almacenes británicos ahora podrá responder a quién le pregunte “¿puedo crear mi propio país si les compro una de sus islas?, No, pero si le interesa tenemos disponible el “principado de Sealand”, ironiza Gabriel Medina.