Consumo muestra su satisfacción con el comercio motrileño durante la campaña de rebajas

Que los comercios cumplan con la normativa en materia de información y publicidad, el control de la inspección, transparencia y accesibilidad al precio y la protección de los derechos de los consumidores han constituido los pilares básicos sobre los que ha trabajado la concejalía durante esta última campaña de rebajas. 

     El responsable del Área de Consumo del Ayuntamiento de Motril, Manuel Ballesteros ha ofrecido un balance sobre las actuaciones llevadas a cabo por la concejalía con motivo de la campaña de rebajas de verano. 

El edil ha indicado que durante este período se ha realizado llevado a cabo un especial control de los establecimientos, tanto en grandes superficies como en pequeño y mediano negocio e hipermercados. “entre otras actuaciones hemos sustentado el grueso de la actividad en tres objetivos básicos: por un lado hacer que se cumpla la normativa, es decir, que tanto la información al consumidor y la publicidad de rebajas se ajusten a la realidad con transparencia. Por otros lado, que la accesibilidad al precio final del producto esté suficientemente clara, con el doble marcaje y el tanto por ciento de descuento incluido en el etiquetado y como tercer punto, proteger el derecho de los consumidores en aspectos relativos a la calidad y los controles para evitar que exista limitación de compra.”

En el comercio motrileño han sido 41 las irregularidades registradas en el Control de consumo, “ninguna de ellas graves que afortunadamente en la segunda inspección han sido subsanadas”, indicaba el concejal. 

En este sentido, Ballesteros ha apuntado que el producto que obtenemos durante las rebajas debe ser de igual calidad al del período habitual y que los establecimientos deben contar con sus licencias de apertura en regla, hojas de reclamaciones y el etiquetado legal de materiales y procedencia del género.

Entre las incidencias habituales, el concejal de Consumo apuntó la falta de distinción entre los productos de saldo, artículos de nueva temporada y productos de rebajas. También repuntan como incidentes la carencia de las nuevas hojas de reclamaciones, que los artículos rebajados sean al menos el 50 % del total de la mercancía en tienda las devoluciones no comunicadas con suficiente transparencia.

Ballesteros ha señalado que “el vendedor no puede rechazar los cambios o devoluciones de ropa interior, complementos o ropa de fiesta alegando motivos genéricos de higiene. Solo por falta de conformidad entre el producto entregado en tienda y el producto que va a devolverse”.

El concejal de Consumo ha mostrado su satisfacción con la calidad y colaboración del comercio motrileño durante esta campaña de rebajas y añadió “que el buen servicio de nuestros establecimientos es un beneficio tanto para el sector como para el propio consumidor”.