UN ANDALUCISMO ÚTIL por Ángel Ortega Fernández (PA)

Fue una explosión de andalucismo reivindicativo el que vivimos el 4 de diciembre de 1977. Cerca de dos millones de andaluces nos lanzamos a la calle a reivindicar el derecho de un pueblo, el andaluz, a reivindicar nuestra autonomía y poder decidir sobre nuestro futuro. Aquel día nos rebelamos contra el poder establecido y, especialmente, contra una España asimétrica a la que se quería dar carta de naturaleza en la constitución, con unos territorios de primera (Cataluña, País Vasco y Galicia) y el resto de territorios dependientes del Estado centralista. 

Manifestaciones en cada rincón de la tierra andaluza, que fueron secundadas por los andaluces residentes en Cataluña. El día fue tristemente ensombrecido por el asesinato, aún sin aclarar ni depurar responsabilidades, de un joven malagueño, Manuel José García Caparrós. El grito fue unánime aquel ‘4 de Diciembre’, quedando en la memoria colectiva de nuestro pueblo como el hito histórico que nos permitió, en la calle y por derecho propio, el derecho a decidir nuestro futuro y dotarnos de los instrumentos necesarios para contar con un gobierno propio. 

Se consiguió romper con aquel Estado asimétrico que se postulaba desde la UCD y gran parte del PSOE, especialmente su clase política catalana, en un debate que hoy, 36 años después, está volviendo a reproducirse con el independentismo catalán. Se pretendieron imponer, a finales de los setenta, dos clases de autonomía, la de primera para los tres “territorios históricos” a través del artículo 151, y de segunda para el resto (el café para todos de Puyol). Aquellas dos velocidades quedaron fracturadas por la actitud de Clavero Arévalo y las  manifestaciones del ‘4 de Diciembre’, reconocido como ‘Día Nacional de Andalucía’, a lo que contribuyó el cambio de actitud del PSOE, que supo hacer propia la lucha del pueblo andaluz contra la UCD, y que se materializaría en el referéndum del 28 de febrero de 1980 y la famosa ‘preguntita’. 

Unos años en los que asistimos al nacimiento de un andalucismo pujante y reivindicativo, bajo las siglas del PSA. Un movimiento nacionalista que reivindicó las raíces y señas de identidad del pueblo andaluz, en pie de igualdad con el resto de territorios del Estado. 

Después llegaría el monopolio der PSOE en la Junta de Andalucía, con una deriva en el poder que pervirtió el sistema para acercarse hasta un régimen político, con la salvedad del gobierno de coalición con los andalucistas. Se daría a continuación un ejercicio ‘absolutista’ del poder, que ha culminado en un auténtico expolio de los recursos públicos, con casos de corrupción de los que los ERE y las facturas de UGT son ejemplo sangrante, trasladando al resto de España una bochornosa imagen del gobierno de los andaluces hasta identificarlos con el ‘bananismo’ más tercermundista. Aunque hayan cambiado de cara, el ‘susanismo’ no cambia el fondo y raíz del problema. “Cambian de collar, pero no de perro”, que diría un castizo. 

Hoy, 4 de diciembre de 2013, no hay nada que celebrar. Inmersos en una profunda depresión económica y de crisis de valores, con un paro en niveles cercanos al 40% en muchos territorios de Andalucía y unos niveles educativos muy por debajo de la media española y europea, como ha desvelado el Informe PISA, el movimiento nacionalista andaluz, de la mano del Partido Andalucista, debe incidir en su línea reivindicativa, en la calle, para seguir defendiendo los intereses de los andaluces. A las puertas de San Telmo, con valentía y rebeldía como esta tarde, porque entendemos que somos necesarios en el Parlamento y la Junta. Queremos ser útiles para los andaluces. 

Los andalucistas debemos ser reivindicativos, pueblo a pueblo, ciudad a ciudad. Hemos de profundizar, entre todos los que sentimos los colores de nuestra tierra, para actualizar nuestros mensajes, ideas y contenidos; para volver a conectar con la realidad de un pueblo que lo está pasando muy mal. Es por ello que desde el PA (especialmente en Almuñécar-La Herradura), vamos de impulsar un proyecto que sea útil y necesario para nuestra tierra; para que el andalucismo sea de nuevo la voz de los andaluces. Como hace 36 años.

"UN ANDALUCISMO ÚTIL, EN EL 36 ANIVERSARIO DEL ‘4 DE DICIEMBRE’ DE 1977"      

 Ángel Ortega Fernández, vocal de la Comisión Ejecutiva Nacional del Partido Andalucista