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Un numeroso grupo de personas se agolpan entorno a la vivienda de Dolores para evitar el deshaucio

Foto Miguel Paquet

Desde primeras horas de la mañana de hoy un gran número de personas se agolpan entorno a la vivienda que ocupa Dolores Ruiz Molina, ubicada en la calle Santiago 37 de Motril,  tras la llamada que ha realizado Stop Deshaucio a través de los medios de comunicación para evitar que ésta ciudadana de 73 años sea deshauciada de su vivienda.

Según Stop Desahucios" Dolores, que sufre una dolencia cardiaca, es víctima de una estafa familiar cuando la sociedad formada por los hijos de Loli, compra la vivienda de la familia Ruiz Molina; y la parte que deben dar a su madre no la pagan, a cambio del usufructo de la vivienda. Tiempo después, con la promesa de conseguirle una pensión no contributiva, uno de los hijos hace que su madre le firme unos papeles que en realidad son un contrato camuflado de alquiler sobre la vivienda. Así se acumularon meses de deuda a causa de un alquiler ficticio que Loli desconocía. Con este argumento ahora quieren arrebatarle la casa".

Csi 8.300 firmas de ciudadanos, se han presentado en el juzgado número 3 de Motril para que el juez reconsidere el deshaucio que aún no se ha llevado a efecto a estas horas de la mañana. 

Según ha explicado a Europa Press la hija de Dolores,  María del Mar, con estos apoyos reclaman al juez que frene el desahucio, teniendo en cuenta el estado de salud de Dolores, y que le permita vivir en su casa, hasta que se resuelva o bien la apelación de las medidas cautelares solicitadas o el propio juicio por nulidad del contrato que, según sostiene su familia, fue "un engaño urdido por su exmarido y apoyado por sus hijos para despojarla de su casa".

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