Almuñécar y La Herradura vivieron una de las mejores fiestas de San Juan de los últimos años

El buen tiempo contribuyo para que almuñequeros y  herradureños  celebraran  con gran éxito la tradicional fiesta de San  Juan hasta desde el domingo y hasta bien entrada la noche del lunes, tal y como estaba previsto. 

            Y es que la buena climatología, unido al estado de la mar y a la que acompañó una gran luna llena hizo que las condiciones fueran  inmejorables para disfrutar con intensidad y hasta el último momento de la fiesta más popular de la playa y con la que se dio,  para la gran mayoría, la bienvenida de verano 2013. 

            Es una jornada donde la  convivencia, de amigos y familiares, vivida junto al mar y  unido a la buena y también tradicional gastronomía a base de los típicos bollos de San Juan, barbacoas o moragas, hacen que la fiesta sea única. Esto ha hecho que, a lo largo de los últimos años, sean muchos, - en algunos casos  miles- los visitantes que deciden sumarse a la misma. 

            Este año la fiesta tuvo su epicentro en la playa Puerta del Mar. En este lugar se instaló un punto de distribución de lámparas tailandesas y un millar de bollos de San Juan.  Hasta el lugar se personó la alcaldesa, Trinidad Herrera,  y numerosos miembros del equipo de gobierno sexitano que participaron, no solamente en el lanzamiento de las citadas lámparas, sino también en el reparto de las mismas junto a la bollería popular. Fue el caso de las concejalas, María del Mar Medina o María del Carmen Reinoso. 

            Cerca del lugar también se levantó la gran hoguera “oficial” que fue prendida por los bomberos provocando  llamas de casi una decena de metros de altura que, junto a las citadas lámparas, puso luz y más calor, se cabía, a la noche mágica. A la media noche, grandes y menores se acercaron a la orilla del  mar para cumplir con otra tradición de esta fiesta como es  el lavado de cara. 

            La imagen de las lámparas tailandesas elevándose  sobre la playa y hacía el mar, con una gran e inmensa luna de testigo reflejándose en el Mediterráneo y el fuego de las hogueras, hacía que fuese algo único, bonito y  extraordinario,  que solo se pudo  vivir en una noche  como la de San Juan de Almuñécar. Y  todo ello, no solo se podía ver desde cualquier punto de la playa o las zonas próximas, sino incluso desde la distancia como el Mirador y las urbanizaciones que rodean la ciudad sexitana. 

            Por su parte, en la playa de  La Herradura, la hoguera “oficial” se ubicó un año más junto al polideportivo y frente al parque “Manuel Vaquero”. En torno a ella el ambiente era inferior a otros años, porque la animación que ponían los Amigos de La Herradura  hizo que vecinos y visitantes se repartiera hacía un lado y otro de la playa con sus respectivas  hogueras más pequeñas. 

            En cualquiera de los casos, la fiesta se prolongó hasta bien entrada la madruga o hasta que amaneció. 

            Lo mejor de todo es que la fiesta se desarrolló con un ambiente tranquilo y de convivencia que hizo que se disfrutara a tope en cualquier playa  o cala del municipio sexitano. 

            Otro de los efectos  lo ponía la gran cantidad de basura que se amontonaba en y junto a los contenedores de las playas.  Se calcula que unas 50 toneladas fueron las que se retiraron de las playas sexitanas en esta fiesta de San Juan, tanto en la mañana del lunes como  este martes.